Un verdadero milagro se dio en una estación de gasolina en Valledupar. Por pocos segundos un empleado de ese establecimiento comercial se salvó de ser aplastado por un techo que se derrumbó.

En la grabación, que solo dura 36 segundos, se puede ver a José Alirio Dugarte, jefe de operaciones de la estación de combustible, saliendo de una de las oficinas de la gasolinera.

Dugarte tardó 10 segundos asegurándose de que la puerta se cerrara de manera correcta. Después caminó hacia su vehículo rojo, un Mazda 232.

Cuando abrió la puerta y se sentó en el puesto del conductor, el techo de la zona externa de las oficinas de la estación de combustible se derrumbó, impactando la parte del baúl del vehículo.

Afortunadamente a la José Alirio no le pasó nada, incluso, en el video se ve cuando salió de su automotor a revisar lo que había pasado.